“Las palabras de la boca del sabio son llenas de gracia,
mas los labios del necio causan su propia ruina"
Eclesiastés 10:12
Muchas ocasiones permitimos que nuestra boca se llene de expresiones de negatividad o de queja como “ya estoy muy viejo y cansado” o “el dinero no alcanza” o “la situación en este país está cada vez peor” y cada vez vemos más ruina, más pobreza, más guerras y todo esto debido a los comentarios ociosos que se están declarando y que establecen una condición de ruina aún peor sobre algo o alguien.
Dice Eclesiastés que el necio con su boca se arruina, si de nosotros sale solo negatividad y frases pesimistas es lo que vamos a recoger porque es lo que estamos declarando para nuestras vidas. Lo que dices te será hecho
En Marcos 11:23 el señor Jesucristo enseña a sus discípulos el principio espiritual sobre el poder de la palabra declarada, “Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.” Entonces amado hermano empieza a aplicar los Principios del Reino para desatar bendición en lugar de maldición. El Apóstol Pablo exhorta a los hermanos de Efeso que ninguna palabra corrompida salga su boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación (Efesios 4:29).
Hago memoria del pasaje del Centurión cuando tan sólo pide al Señor Jesucristo que declare la sanidad de su siervo, porque este hombre entendía el Poder de la Palabra declarada.
Desatemos sobre nuestras vidas, sobre nuestras familias, sobre nuestras naciones, palabras que bendigan, que desaten abundancia, paz, productividad, amor, que desaten todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre.
(Filipenses 4:8).
Recordemos que cualquiera que sea la situación que venga a afligirnos o a presionarnos no debemos permitir en nosotros comentarios de queja que expresen en nosotros como Hijos de Dios una derrota, sino que tomemos la Palabra de Dios que más cortante que espada de dos filos y declaremos a las circunstancias que deben sujetarse en el Nombre del Señor Jesucristo quien nos entregó la victoria sobre toda vicisitud.
Que tu boca esté llena de alabanza y sea el instrumento de adoración y agradecimiento para nuestro Señor Jesucristo.
Que Dios os bendiga……
7 comentarios:
R.I.P. (rábanos i pimientos)
Tema muy delicado y que se presta a interpretaciones raras.
Me comentaba no hace muchos días Miguel Moreno: He escuchado de ciertos pastores predicar que el burrito que Jesús tomó para entrar en Jerusalén sería en uestros tiempos hablar de un "Mercedes" por tanto es licito tener un Mercedes. Jesús vestía una túnica de una sola pieza, una prenda carísima, por tanto debemos y podemos vestir ropa de marca y cara...
Jesús sanó y alimentó cubriendo necesidades básicas, no fue regalando millones de denarios para enriquecer a la gente. Él mismo fue ejemplo de sencillez, austeridad y renuncia a los bienes terrenos. Bendecir y no maldecir, totalmente de acuerdo pero cuidado cuando nos referimos al bienestar porque sin querer entrar en la "Super fe" estamos más cerca de ella que de la sana doctrina del contentamiento.
Cuando Jesús envío a los doce a predicar les recordó: No llevéis nada para el camino: ni bastón, ni bolsa, ni pan, ni dinero... cargarnos de demasiadas comodidades innecesarias son un estorbo para nuestras vidas.
¿Vivitaremos a la viuda, al pobre y desamparado alardeando de nuestras riquezas o tendremos que compartir lo que Dios nos ha dado?
No hay mejor ejemplo que Jesús para aprender a ser desprendidos y vivir con la única y suficiente meta puesta en el cielo y la salvación de los pecadores.
David le decía abiertamente a Dios sus situaciones de angustia, temor, dolor etc. No podemos llamar a las cosas que son como si no fueran ni distorsionar la realidad, sin queja pero sin fraude.
La fe sin obras está muerta y las palabras sin obras son simples palabras que sólo sirven para llenar el tiempo, libros y la cabeza de pajaritos.
Prefiero que la acción impulse las palabras, a que las palabras la suplan esperando mejores tiempos.
Prefiero abrazar al pobre, al herido, al que sufre, que llenar el cielo de palabras.
Prefiero llorar con el desamparado compartiendo mi pan, a estar pidiendole a Dios que lo restaure mientras duermo placidamente bajo techo y con calefacción.
Prefiero morir salvando un alma que vivir recordando las promesas del Reino.
Dios podía mandar un ángel para salvar al mundo, pero eligió venir personalmente. Podemos esperar que Dios salve las almas con nuestras palabras o salir nosotros a buscarlas.
Posiblemente en el tiempo que he tardado en escribir este pensamiento más de un alma ya esta en el infierno por no haber oido nuestra predicación.
Palabras, las justas. Hechos todos.
Dios nos de gracia para vivir una vida cristiana comprometida con el amor y la salvación del perdido.
Bendiciones a todos
Hola todos (los que lo lean...)!!!
Tema importante y como dice Santi, mal interpretado en muchas ocasiones, es suceptible de malos entendidos y de inestabilidad en la interpretación.
Comparto contigo Fran la motivación que, entiendo, te ha llevado a escribir. No nos quejemos, no maldigamos con nuestras palabras, bendigamos, confesemos la victoria de Dios sobre satanás, no confesemos derrota porque Dios ha ganado la guerra, aunque a veces perdemos alguna batalla (ahí no podemos confesar que hemos vencido, aunque sí que venceremos).
En este tema he escuchado algunas incertezas, algunas de las cuales parecen asomar en este escrito. Me he preguntado si ponerme o no con ello, pero al final me he dicho, bueno, estamos en confianza, ¿por qué no? de todas maneras nadie lo va a leer... jajajaja
El Poder con mayúsculas lo tiene sólo Dios. Poder para crear, para sanar, para liberar. Nosotros seremos canales de ese Poder mientras estemos conectados a Él, pero no es nuestro.
La fe no tiene poder, algunos dicen que sí, pero el poder lo tiene Dios, y la fe es un requisito para agradarle, para pedir, para la salvación etc.
La lengua tiene influencia, podríamos decir también "poder", pero en minúsculas.
Si yo me quejo, eso ejerce una influencia sobre mí y los que me oyen (y me entienden), influencia negativa. Si yo bendigo a alguien, lo animo, lo motivo, ejerceré una influencia beneficiosa sobre su vida.
Ahora bien, frases como "lo que dices te será hecho" o que las guerras, ruinas y demás sean debidos a "comentarios ociosos" creo que no son del todo correctas. El problema está en el corazón del hombre y es el pecado, y como dice la escritura, "de lo que está lleno el corazón habla la boca". Si todo el mundo fuese mudo, habrían las mismas guerras y miserias.
Y es que a veces se le confiere a la palabra dicha no sólo una influencia sino un poder místico, incluso creador, algo que no tiene.
Es cierto que hay que confesar para salvación, para arrepentimiento, para perdón y demás, pero no es cierto que el poder para que un monte se mueva esté en la palabra dicha, el Poder lo tiene Dios, es necesaria la fe, es necesaria la palabra, y es necesario que la palabra que digamos sea conforme a la voluntad de Dios.
Hay predicadores que oran por los enfermos y al acabar dicen, "confiesa que estás sano", como si esa confesión tuviera Poder para cambiar físicamente una enfermedad. Yp crep que eso es erróneo, porque mucha gente miente practicando eso, confiersan sanidad cuando siguen enfermos. Si estás sano confiesa tu sanidad, si no, no digas que estás sano, confiesa que Dios tiene poder para sanarte. Si Dios te ha dado una palabra rhema de que te va a sanar, confiesa que Dios te ha dado esa palabra, pero no confieses que está hecho hasta que no lo esté.
La palabra de Jesús tiene Poder con mayúsculas, la nuestra no. Con nuestra palabra influenciamos para bien o para mal, pero no podemos crear nada. Cuando somos canales de ese Poder de Dios, debemos confesar la palabra, pero no confundamos el Poder con la palabra nuestra. Normalmente los enfermos que se sanaban por medio de los discípulos, lo hacían tras ellos orar por los enfermos, pero a veces no era necesaria la palabra, con la sombra bastaba. No podemos decir que nuestra sombra tenga poder.
Los labios del necio le causan su propia ruina, porque miente, hiere, insulta y vitupera, y eso le causa ruina, porque siega lo que siembra, pero el problema no está tanto en lo que dice, sino en lo que es, un necio, y lo que es, se manifiesta por su lengua. Un necio mudo también será un arruinado.
A veces se cree que la palabra en sí tiene poder para "desatar" bendiciones, o para generar algo por sí misma. Eso es cierto a medias. Si yo le digo a mi hijo cada día que es un imbécil, esa palabra influenciará en mi hijo negativamente, él será un imbécil, no por lo que yo le diga, sino en la medida de que él me crea. La palabra en sí, por sí sola, no hace de mi hijo un imbécil. La prueba la tenemos en que si yo se lo digo en chino, y no me entiende, no ejerecerá ninguna influencia. Si fuera verdad que la palabra por sí misma tiene poder, daría igual que lo dijera en chino o en castellano, haría de mi hijo un imbécil.
No sé si me explico... es un tema inestabale y difícil de explicar.
Besos!
Saludos:
Es cierto que esta muy en voca de ciertos predicadores, el poner en situacion mas que incomoda al dolido, con este tipo de aseveraciones; que a mi modesto modo de ver, no hace mas que poner de manifiesto una practica agorera, que condena la biblia muy severamente, llamando agoreros a estas personas que caen en este pecado.Mas aun si se toma como practica abitual desvirtuando toda relacion de hermandad en la iglesia.
Agorero:Que predice sin fundamento males o desdichas.
Por otra parte entiendo a Francisco, i su motivacion, como dice David a partir de su primer punto i aparte i hasta el segundo punto i aparte. Pero ¿aquien presentare mi necesidad? (¿cuando el ciervo brama por las aguas?)esto no es mas que una queja!!.Otra cosa bien distinta es maldecir con palabras groseras o actos de violencia.Sobrellevar,soportar i confesar cristianamente los males de este siglo honra al cristiano.De que baldria que yo me presentara a vosotros como quien no tiene necesidad de nada si es mentira(tengo hambre i sed de justicia) bueno que el SEÑOR nos vendiga a todos.
Hola quiero hacerme un auto comentario para aclarar el tema.
Lo que he escrito tiene versiculos, aclaro que no creo en la super fe ni en el poder de crear. Solo Dios crea y nadie mas, solo a El le pertenece el PODER (mayuscula)
Pero si creo que tal palabra me dices tal corazon me pones;
Por lo tanto bendecid mas no maldigais,eso quise expresar.
Creo que tenemos que tener un equilibrio en la fe, tanto la mini fe como la super fe son extremos que no benefician el crecimiento del cristiano con una sana doctrina.
Espero haber aclarado el tema y tengamos oidos espirituales.
Un saludo saludable.......
Amén Fran.
Hemos usado tu artículo como punto de partida para el tema de los extremos en la doctrina de la confesión positiva y demás, pero no todo lo escrito iba por ti, ni todo lo ponderado era por causa tuya.
La intención tuya es positiva y la conclusión también, es en el desarrollo del argumento donde había más lugar a la confusión, no porque estés confundido en el fondo, sino en algunas formas de frases hechas y demás... que nos han servido. por lo menos a mí, de punto de partida para aclarar algunas partes.
Pero el grueso del artículo para mí está bien.
Un abarazo!
Hola a tot hom!! jeje
Pues sí, creo que se pueden ver las dos caras de la moneda y los dos extremos a los que mucha gente puede caer erroneamente.
Hay que buscar un equilibrio en todo, porque también puede traer confusión a los mismos que escuchan estas palabras...
Analicemos todo lo que decimos y las frases hechas. Dios quiere que lo que le digamos salga de un corazón sincero, buscando en todo momento agradarle.
Por cierto, me ha gustado es especial el comentario de Santi. Me ha hecho reflexionar, la verdad... Vale, sí los de los demás también!! jeje que si no os ponéis celosos y eso no le gusta a Dios jejeje
Un besito a todos (los que leeis.. xD yo sigo con las indi. del David ;p)
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